Dietas para problemas Digestivos

Dietas para problemas Digestivos

El tipo de alimentación del día a día puede condicionar la salud del sistema digestivo de las personas. Los problemas gastrointestinales están íntimamente ligados a lo que se come y al estilo de vida en general; y actualmente, el patrón de consumo de las personas no es el adecuado.

Cambiar hábitos alimentarios y potenciar el ejercicio físico son clave para evitar o mitigar los efectos secundarios.

¿Te puedo ayudar?

Contacta conmigo o reserva ya tu consulta online

      Los patrones alimentarios que lleva actualmente la población no son muy adecuados. El tipo de dieta que se suele llevar a cabo está compuesta por productos cargados de azúcar, grasas de muy mala calidad y harinas refinadas que aportan un valor nutricional pésimo a la persona que lo consume, aumentando así el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, como hipertensión, colesterol elevado u otros problemas relacionados con el sobrepeso y la obesidad.

      La falta de tiempo para cocinar y organizar las comidas diarias también son factores que determinan la manera en la que se cocina en la sociedad. De manera general, se priman cocciones rápidas y sencillas, sin poner demasiada atención a la calidad de lo que se come; incluso se recurre a los restaurantes de comida rápida para solucionar el día a día.

      Si este tipo de alimentación perpetúa en el tiempo, se aumenta de manera considerable las probabilidades de padecer problemas de digestión, como por ejemplo el estreñimiento, el reflujo gastroesofágico o la distensión abdominal… Existen infinidad de problemas gastrointestinales y, en muchas ocasiones, las personas no ponen atención a los síntomas, dándolos como «normales», cuando realmente están estrechamente relacionados con el tipo de alimentación y se pueden disuadir.

      ¿Qué problemas digestivos existen?

      Como te he contado, existen muchos problemas gastrointestinales. Si tienes la duda de que puedas padecer alguno de ellos te aconsejo que acudas a tu médico para que pueda valorarlo con más detalle. Una vez sea diagnosticado, un tratamiento nutricional adecuado para ello es la clave, y debe ser siempre un dietista-nutricionista el encargado de enfocar la alimentación en cualquier problema estomacal.

      En este punto, te haré un breve resumen de los problemas digestivos más comunes que los dietista-nutricionista nos encontramos en consulta.

      Estreñimiento

      El estreñimiento está presente en la vida de muchas personas y puede interferir en el bienestar de las mismas. No acudir de manera frecuente y regular el baño puede ocasionar problemas de hinchazón y malestar general que dificultan el día a día de las personas que lo sufren. La alimentación y la práctica de ejercicio físico es muy importante para conseguir un tránsito intestinal adecuado.

      La sabiduría popular siempre ha recomendado acudir al baño todos los días, mínimo una vez, pero esta recomendación no siempre está acertada. Acudir al baño cada dos días también es normal, puede ser habitual en personas que tienen un ritmo intestinal lento.

      Se considera estreñimiento cuando se evacúa tres veces o menos en una semana.

      Reflujo gastroesofágico

      Más conocido como ardor. Se trata de un problema de salud que puede llegar a ser bastante desagradable de llevar en el día a día. Cuando existe reflujo gastroesofágico es clave cuidar los hábitos de alimentación pero también cuidar el estilo de vida, ya que este puede influir, en la aparición o no de síntomas; la postura que se toma tras comer es clave de ello, entre otras muchas cosas.

      Existen ciertas pautas alimentarias que es mejor evitar, como el consumo de alimentos picantes o irritantes, el exceso de especias picantes a la hora de cocinar o el consumo de alcohol, que favorece la aparición de síntomas o los agrava tras la ingesta. En este punto, la forma en la que se cocinen los alimentos también es clave para facilitar la digestión cada día.

      Síndrome de intestino irritable

      También se le conoce como colon irritable y por las siglas SII. Este problema gastrointestinal requiere de un tratamiento nutricional mucho más detallado; se debe llevar a cabo la dieta baja en FODMAPS, que tiene como objetivo mejorar las digestiones de la persona, además de identificar qué alimentos le están provocando ese malestar.

      Se trata de un problema de salud que debe ser tratado, además de por el médico del aparato digestivo, por un nutricionista especializado en este campo, ya que las reintroducciones de alimentos que se realizan deben estar 100% personalizadas.

      Enfermedad de Crohn

      Este problema digestivo (también considerado autoinmune) distingue claramente dos fases, una en la que la persona es asintomática (no presenta síntomas) y otra en la que existe un brote. Tanto si la enfermedad de Crohn está en fase asintomática como si está en pleno brote, la alimentación juega un papel fundamental para la mejora de síntomas. Esta debe cambiar dependiendo de la fase.

      El tratamiento nutricional debe estar pautado y debe ser guiado por un dietista-nutricionista que valore la situación de la persona.

      Hernia de hiato

      La hernia de hiato es un problema de salud que puede repercutir en el día a día de las personas, dificultándole las comidas. Se trata de un problema de salud que se da en la parte alta del estómago y uno de los principales síntomas que presenta es el reflujo o ardor.

      El tipo de alimentación es clave para que la persona pueda disfrutar de las comidas sin los síntomas característicos de la enfermedad. El tratamiento nutricional es muy parecido al del reflujo gastroesofágico, pero cada persona es totalmente distinta y es muy importante personalizar al 100% el tratamiento para conseguir los objetivos establecidos, tanto por la persona como por el dietista-nutricionista.

      Disfagia

      La disfagia es un problema de salud digestiva que impide o dificulta tragar los alimentos. Dependiendo siempre del grado de enfermedad, se podrán tolerar ciertas texturas más sólidas.  De manera general, el tratamiento nutricional es clave y se debe evaluar con detenimiento si pudiese existir o no un déficit nutricional por la falta de una ingesta correcta de alimentos.

      Este problema digestivo puede provocar tos a la hora de comer e incluso atragantamiento.

      Como podrás ver, existen muchos problemas de salud digestiva y todos ellos requieren un tratamiento nutricional concreto que ayuda a aliviar e incluso a eliminar los síntomas generados. Para conseguir este objetivo es importante que sea un dietista-nutricionista especializado el que planifique y evalúe la situación. Si tienes alguno de estos u otros problemas gastrointestinales, ponte en contacto conmigo, podré ayudarte.

      Dieta para problemas digestivos

      En este punto, es importante saber alimentarse de manera inteligente y consciente. Se debe poner el foco en priorizar alimentos de origen vegetal, como las frutas, verduras y legumbres, pero también se deben limitar el consumo de productos insanos que perjudiquen el proceso de digestión, al igual que también es muy importante cuidar la salud mental, ya que la aparición de estrés o ansiedad de manera continuada no ayuda a mejorar en los síntomas, sea cual sea la patología digestiva.

      Cada problema gastrointestinal es totalmente distinto, y como has podido ver, el tratamiento nutricional debe estar enfocado de una manera diferente, dependiendo, no sólo del problema de salud en cuestión, si no también de la persona, sus gustos, hábitos y síntomas. Para ello, el dietista-nutricionista es el profesional sanitario adecuado.

      El principal objetivo de la dieta para cualquier problema intestinal es mejorar los síntomas si los hubiese y que la calidad de vida de la persona sea óptima. Para conseguir esto, es primordial priorizar una correcta educación nutricional, donde se enseñe a la persona cómo debe cuidar su alimentación y su estilo de vida.

      Alimentos recomendado para problemas digestivos

      A continuación, te muestro una lista de alimentos permitidos para problemas digestivos. Es importante aclarar que se trata de ejemplos y que no significa que en todas las patologías digestivas deban consumirse. Como te habrás dado cuenta, cada problema de salud requiere de un tipo de alimentación distinta y, en algunas ocasiones, es mejor limitar ciertos alimentos, aunque sean de base ya saludables.

      Frutas Huevos
      Verduras Lácteos
      Legumbres Carne
      Frutos secos y semillas Pescados
      Cereales integrales de calidad Productos vegetales (tofu, tempeh…)

      Alimentos no recomendados para problemas digestivos

      En cambio, existen ciertos productos o alimentos poco recomendados cuando existen patologías digestivas. Y al igual que en el punto anterior, esta lista se trata un ejemplo. Son productos que o no son saludables en ninguna persona (tenga o no alguna patología) o es poco recomendable en estas patologías porque son alimentos irritantes o dificultan las digestiones (aun siendo saludables).

      A continuación, te detallo una lista con alimentos no recomendados para problemas digestivos:

      Cualquier clase de bollería Snacks
      Productos ultraprocesados y precocinados Cereales blancos
      Embutidos Refrescos
      Salsas comerciales Alcohol
      Café Alimentos picantes o irritantes

      Estrategias nutricionales para problemas digestivos

      Dependiendo de cada patología y cada persona, en consulta se pueden llevar a cabo infinidad de estrategias nutricionales para conseguir mejorar los síntomas de la persona y conseguir calidad en su día a día. Se pueden llevar a cabo estrategias como la dieta baja en FODMAPS, la dieta cetogénica, una dieta por exclusión, la dieta blanda… En este punto, te cuento dos de ellas.

      Dieta keto para problemas digestivos

      La dieta keto, también conocida como dieta cetogénica, es un tipo de dieta estricta que busca reducir al máximo el consumo de carbohidratos. Hice un post hablando sobre la dieta cetogénica. El objetivo principal de esta estrategia nutricional es reducir el consumo de carbohidratos en la dieta para que el organismo entre en cetósis. Simula, a muy grandes rasgos, el ayuno.

      Un elevado consumo de carbohidratos provenientes de pan, pastas, patata… provocan una inflamación el organismo y dificultan las digestiones. Si existe una patología digestiva de base, abusar de este tipo de alimentos puede llegar a ser perjudicial para la persona. Como te vengo comentado en toda la página, cada problema de digestión es completamente distinto y cada persona exterioriza los síntomas de una manera diferente, por lo que el tratamiento nutricional deberá adaptarse siempre a ello. Esto no significa que la dieta keto sea ni beneficiosa ni perjudicial para tratar un problema digestivo. Siempre es importante evaluar cada situación y patología.

      Dieta blanda para problemas digestivos

      En muchas ocasiones, el tratamiento a llevar a cabo cuando existen problemas de salud intestinal es la dieta blanda, un tipo de dieta que busca mejorar y facilitar las digestiones. Técnicamente se le conoce también como dieta de protección gástrica y su único objetivo es ese mismo, proteger el sistema digestivo de la persona.

      En muchas ocasiones es pautada en el hospital tras una intervención quirúrgica, pero también cuando existe alguna patología digestiva de base, como gastroenteritis, vómitos o cualquier otro problema puntual de salud. La dieta blanda no consiste únicamente en comer arroz blanco y pollo a la plancha, si no que se debe componer de otros alimentos que sean saludables y que alivien los síntomas provocados. Para ello, como siempre, es recomendado que sea el dietista-nutricionista el encargado de pautar qué tipo de alimentación debe llevarse a cabo y cuanto tiempo debe durar el tratamiento porque puede tratarse de un tipo de alimentación bastante restrictiva y se debe llevar a cabo una reintroducción de los alimentos, según la tolerancia de la persona. No es un tipo de dieta que se deba llevar de por vida.

      ¿Cómo cocinar los alimentos con problemas digestivos?

      La manera en la que se cocinan los alimentos también es clave para facilitar o empeorar las digestiones. Si por norma general se emplean cocciones agresivas o pesadas, las digestiones tienden a ser molestas y dificultan el día a día de la persona con problemas digestivos.

      La mejor recomendación es eliminar todo lo posible el consumo de frituras porque, además del exceso de calorías que puedan tener, el contenido en grasas es mucho más elevado y esto provoca unas digestiones más complicadas y pesadas. Por ello, la principal recomendación cuando existen problemas digestivos es emplear técnicas de cocción más livianas como el papillote, el horno, la plancha o el hervido.

      Como siempre, se deberá evaluar la situación de cada persona y el tipo de patología digestiva que presenta para conseguir una manera de alimentarse correcta y que le ayude en el día a día.

      Si presentas alguna de estas u otras patologías digestivas, ponte en contacto conmigo y juntos podremos hacer la estrategia nutricional que mejor se adapte a ti y mejore tu día a día.