Dieta baja en fósforo

Dieta baja en fósforo

Según la National Kidney Foundation, estas dietas están relacionadas e indicadas en personas con enfermedades renales, ya que no se dispone de la capacidad suficiente para poder eliminar su exceso en sangre.

El fósforo es el segundo mineral más abundante del organismo. En una persona sana, el exceso de fósforo se elimina por los riñones. Sin embargo, en personas con insuficiencia renal crónica se reduce la capacidad para eliminar el fósforo, provocando que este mineral se acumule en la sangre.

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      Tipos de fósforo

      Es importante saber que existen dos tipos de fósforo que se puede encontrar en la naturaleza, el fósforo inorgánico y el orgánico. Te cuento con detalle dónde poder encontrarlo y las fuentes donde se obtienen:

      • Fósforo inorgánico. Está presente en aditivos de la industria alimentaria y alimentos procesados en forma de fosfato dicálcico, fosfato disódico o fosfato monosódico (bebidas azucaradas, productos instantáneos, galletas, bollería, cereales de desayuno, salchichas, embutidos…).
      • Fósforo orgánico. Este tipo de fósforo está presente de forma natural en alimentos ricos en proteínas de origen animal, como en las carnes, los pescados, los huevos y lácteos, y en alimentos de origen vegetal, como los frutos secos, las legumbres y las semillas. También está presente en otros alimentos como los cereales integrales o el chocolate.

      Pero es importante saber que el nivel de absorción en sangre es diferente de un tipo de fósforo a otro. Por un lado, el fósforo orgánico se suele absorber en torno al 20-50% (dependiendo de si es vegetal o animal), mientras que el fósforo inorgánico se suele absorber en torno al 90-100% de su totalidad. Esto es importante conocerlo para que la dieta se adapte al completo y la personalización sea lo más eficaz posible.

      Valores adecuados de fósforo

      Para una población sana, el NIH (National Institutes of Health) establece ciertos valores de fósforo recomendados según la edad. En base a esto, se debe elaborar una dieta acorde a las necesidades de la persona. Los valores de fósforo recomendados son los siguientes:

      • Niños (1-3 años): >460mg.
      • Niños (4-8 años): >500mg.
      • Niños (9-13 años): >1250mg.
      • Adolescentes (14-18 años): >1250mg
      • Adultos de más de 19 años: >700mg.

      Por otro lado, existe evidencia científica que demuestra que en las personas con patología renal con niveles de fósforo en sangre superiores a 5mg/dl aumenta claramente el riesgo de complicaciones. Sin embargo, valores en el umbral superior de la normalidad (3,5-4,5mg/dl) también se asocian a mayores problemas en personas con patologías renales o cardíacas previas.

      Ventajas de hacer una dieta baja en fósforo

      Como te he comentado antes, este tipo de dieta, en la gran mayoría de casos, se debe pautar cuando existe una enfermedad renal para conseguir un mejor pronóstico de la enfermedad. Por ello, la principal ventaja que se consigue es la disminución del riesgo y empeoramiento del pronóstico de la enfermedad renal, así como las consecuencias derivadas de la misma.

      También puede ser beneficioso llevarla a cabo en personas con problemas cardíacos, pero en este caso, se debe valorar cada caso de manera individual.

      Inconvenientes de hacer una dieta baja en fósforo

      Una dieta baja en fósforo y que no esté pautada con una justificación clara, puede ser perjudicial para personas que no tengan problemas renales o cardiovasculares.

      Según el NIH la mayor parte del fósforo se encuentra en los huesos y en los dientes, por lo que un déficit de este mineral podría afectar a nivel óseo.

      Otros síntomas que puede provocar una dieta baja en fósforo injustificada son fatiga, debilidad, anemia, mala coordinación, infecciones, problemas cutáneos y confusión.

      Dieta baja en fósforo

      Como has podido observar hasta el momento, la dieta baja en fósforo debe estar pautada bajo la supervisión de un nutricionista que personalice el tratamiento de cada persona. Si necesitas ayuda con tu dieta, ponte en contacto conmigo, estaré encantada de ayudarte.

      A grandes rasgos, es importante que los alimentos que se incluyan en este tipo de dieta sean de calidad, pero sí que existen ciertos alimentos que es importante excluir y otros potenciar para conseguir un equilibrio adecuado entre una alimentación saludable y unos niveles óptimos de fósforo en la dieta, enfocado siempre en la persona con este problema de salud.

      Recomendaciones para una dieta baja en fósforo

      El contenido de fósforo en la dieta va a estar directamente relacionado con las proteínas que contenga. Por ello, durante muchos años, se ha aconsejado a las personas que necesitaban limitar el fósforo en la dieta, eliminar todos los alimentos ricos en proteínas. Sin embargo, actualmente las recomendaciones han cambiado para evitar restringir en exceso la ingesta de proteínas, esenciales para el organismo; además una dieta baja en proteínas lleva asociado la eliminación de muchos alimentos de buena calidad. Es importante escoger una fuente de proteínas de calidad y medirlas bien durante el tratamiento nutricional.

      Pero sí que es cierto que, aunque las limitaciones no sean tan exigentes como hace años, es importante seguir una serie de recomendaciones para reducir al máximo el contenido de fósforo de los alimentos. Nunca se llegará a un contenido 0, pero sí que se puede llegar a reducir bastante.

      Como te he comentado antes, es importante conocer el porcentaje de absorción de fósforo y potenciar aquellos que tiene uno menor.

      Por otro lado, existen ciertas recomendaciones que reducen el contenido de fósforo de los alimentos. Aquí te digo cuales:

      • Remojo. Es una técnica que reduce el contenido de fósforo en las legumbres, en las frutas y en las verduras. Lo ideal es poner en remojo los alimentos unas horas antes de cocinarlo y luego eliminar ese agua. Parte del fósforo queda en el agua de remojo.
      • Doble cocción. Se puede hacer con cualquier alimento. Al cocinarse en agua, el fósforo migra a esta y, pasados unos minutos, se puede desechar el agua y seguir cocinado con agua nueva.
      • Comprar los alimentos en conserva o congelados. Es recomendado que, los alimentos que están en conserva, se limpien bien con agua para reducir al máximo el fósforo que queda en el líquido de la conserva.

      Alimentos a evitar en la dieta baja en fósforo

      Para poder estructurar, de manera general, la dieta baja en fósforo, es importante evitar aquellos alimentos que tengan un porcentaje de absorción más elevado de este mineral. Aquellos que tienen un porcentaje elevado (fósforo inorgánico) suelen ser productos ultraprocesados; los que tienen un porcentaje moderado suelen ser aquellos alimentos ricos en proteínas y que son de origen animal; y los que tienen un porcentaje bajo de absorción son aquellos alimentos de origen vegetal.

      Aquí te dejo algunos ejemplos de alimentos a evitar en una dieta baja en fósforo:

      • Lácteos: Se recomienda evitarlos todo lo posible. Si se desea consumir, lo recomendado es no sobrepasar las dos raciones al día. Se pueden sustituir por bebidas vegetales, como las de soja y arroz, que tienen menos contenido de fósforo en su composición.
      • Huevo: La yema es la parte del huevo más rica en fósforo. Dependiendo de las limitaciones de la persona y el estadio de su enfermedad, es mejor controlarlo. Se pueden utilizar las claras pasteurizadas que se encuentran en el supermercado.
      • Frutos secos: Conviene evitarlos todo lo posible porque son muy ricos en fósforo. Si se desea tomar, es recomendado no sobrepasar de 30 gramos al día, siempre naturales o tostados (y tomarlos, como mucho, 2-3 veces a la semana).
      • Champiñón: Se trata de una de las verduras más ricas en fósforo. Si se desea consumir, lo más recomendado es no sobrepasar los 200g/día y siempre cocinado.
      • Fruta deshidratada: No se recomienda sobrepasar las 3-4 unidades/día si se quieren consumir, pero lo más recomendado es evitarlas todo lo posible porque, al deshidratar un alimento, los nutrientes se concentran mucho más y se toma más cantidad de fósforo (y del resto de nutrientes).
      • Avena: Si se consume cruda, no está recomendada porque tiene altos niveles de fósforo, pero si se consume cocinada se reduce la cantidad, por lo que se recomienda no sobrepasar los 40-50g/día.

      Alimentos a potenciar en la dieta baja en fósforo

      En términos generales, salvo las excepciones que te he comentado antes, se pueden incluir la gran mayoría de alimentos en la dieta baja en fósforo; lo único que se tendría que tener en cuenta son las recomendaciones que he pautado en los puntos anteriores.

      Aquí te dejo una lista de los alimentos a potenciar en una dieta baja en fósforo y qué opciones tienes para disminuir su cantidad:

      • Frutas y verduras: Suelen contener pequeñas cantidades de este mineral, por lo que son muy recomendadas. Siempre que sean en conserva, se haga la doble cocción o estén previamente en remojo, se pueden consumir.
      • Cereales: La mejor opción siempre será escoger los derivados integrales porque contienen más cantidad de fitatos, un antinutriente que impide gran parte de la absorción de fósforo.
      • Legumbres: Siempre que se haga una doble cocción o se compren en conserva, se pueden consumir todas sin problemas.
      • Bebidas o yogures vegetales: Son la alternativa al consumo de lácteos.
      • Huevos: Potenciar mucho más el consumo de la clara frente a la de la yema porque esta última tiene más cantidad de fósforo.
      • Carnes: Mejor consumir las carnes blancas de buena calidad, como el pavo o el pollo.
      • Pescados: La mejor opción siempre serán los pescados blancos, como el bacalao o la merluza.

      Como has podido ver, la dieta baja en fósforo no es una dieta que se deba pautar a todo el mundo y que se pueda hacer sin supervisión. Se trata de una dieta muy específica en la que se tiene que tener en cuenta muchos otros factores para poder conseguir los objetivos de la persona, por lo que la personalización del tratamiento es la clave, sobre todo para conseguir, en la gran mayoría de casos, la frenada de una pérdida renal.

      Si necesitas ayuda con tu alimentación baja en fósforo, ponte en contacto conmigo, estaré encantada de ayudarte.