
Sara Jiménez » Blog de Sara Jiménez » Alimentación saludable » Potomanía, cuando beber agua es un problema
Todo el mundo conoce los beneficios del agua. El agua es lo único que el ser humano necesita para sobrevivir. No hay nada imprescindible en cuanto a alimentación, salvo el agua. Un consumo adecuado de agua evita la deshidratación de la persona.
Además de poder hidratarnos, el agua ayuda a regular la temperatura corporal, mejora el sistema inmunitario (las células se encuentran bien hidratadas y pueden hacer su correcta función), ayuda al correcto funcionamiento del sistema digestivo, es decir, evita el estreñimiento, así como los gases. También ayuda a que el sistema renal funcione mejor, es decir, que los riñones puedan filtrar de manera adecuada.
Como te comento, el consumo de agua sólo trae beneficios para las personas, pero como todo en esta vida, un consumo excesivo también puede ser peligroso para la salud, y hoy quiero hablarte de la potomanía.
¿Sabías que la potomanía es un problema de salud que incita a beber agua (u otros líquidos) de manera descontrolada? En este post te cuento con detalle.
Como te he comentado, el agua es el único líquido que el ser humano necesita tomar. Las recomendaciones generales de consumo de agua son aproximadamente entre 2 litros al día para mantener una correcta concentración de electrolitos en el organismo y el correcto funcionamiento de los órganos internos, además de poder realizar todas las funciones que te he comentado.
Esta recomendación, bajo mi punto de vista, la hemos entendido mal. Es cierto que debemos beber dos litros de agua al día, pero no es necesario que se beba en vaso. Las recomendaciones de las que hablo hacen referencia a los vasos de agua que se pueda beber a lo largo del día, pero también hacen referencia al consumo del agua que está presente de manera natural en los alimentos, como la fruta, las verduras, la leche, las infusiones, los caldos, el café, etc.
Pero cuando se exceden esos límites recomendados, el consumo de agua puede llegar a ser un problema.
La potomanía es un problema de salud que incita a ingerir grandes cantidades de agua de manera impulsiva y sin control. Por el momento, la causa de este trastorno es desconocida y suele afectar a personas que hayan sufrido algún tipo de trastorno mental; también puede afectar a personas que padecen problemas hormonales de salud, como la diabetes (cuando el azúcar está elevado en sangre, la persona siente una necesidad elevada de beber agua; esto puede desencadenar episodios de potomanía).
En la actualidad, no hay datos suficientes que revelen el porcentaje exacto de los afectados en España y en otros países porque suele ser un trastorno difícil de diagnosticar.
Un porcentaje bastante alto, causante de este problema, es el factor mental. Al tratarse de un trastorno psicológico, existen factores implicados en el desarrollo de esta enfermedad. Por ello, existen personas con ciertos problemas de salud o patologías que son más propensas a padecer potomanía. Aquí te cito algunos ejemplos:
Los síntomas de la potomanía pueden ser diversos y en función del grado y la persona, pueden aparecer con mayor o menor incidencia. Una persona con episodios de potomanía puede experimentar síntomas como los que te cito a continuación:
Las causas de esta enfermedad no están claramente definidas, debido a que cada persona sufre los síntomas de manera distinta y su procedencia puede ser también diferente.
La enfermedad puede ser ocasionada por muchos factores, entre ellos, la alteración en el funcionamiento del hipotálamo (aunque sucede en pocos casos). El hipotálamo es el responsable de mantener un correcto equilibrio hídrico en el organismo. También es el encargado de advertir de la falta de agua en el organismo a través de la sed. Una alteración en alguna de sus funciones, puede desencadenar episodios de potomanía en la persona.
Otras causas, y más comunes, de la aparición de este problema de salud pueden ser los trastornos neurológicos, como la esquizofrenia, la depresión o la anorexia nerviosa; además de enfermedades metabólicas como la diabetes.
El agua, como te he comentado, es el sustento más importante para la supervivencia humana, pero en cantidades exageradas puede llegar a ser muy perjudicial. Las cantidades recomendadas y que suele consumir la población general no suponen ningún riesgo para la salud, no debe suponer mayor preocupación. Pero, como sabrás a estas alturas del post, su consumo en grandes cantidades puede derivar en complicaciones mucho más graves.
La potomanía puede causar intoxicación hídrica, que es la alteración de los niveles normales de electrolitos, principalmente de sodio, de potasio y de cloro, e incluso puede ocasionar complicaciones como la mielinosis central pontina, una enfermedad que provoca la destrucción de las vainas de mielina.
Este abuso de agua también puede causar hiponatremia. Esto hace que disminuyan los niveles de sodio en sangre y aumenten los niveles de agua en el cuerpo, provocando acumulación de líquidos en las células del organismo. Una de las complicaciones que puede derivar la hiponatremia es la aparición de edemas en el cerebro, una acumulación de líquido en dicha parte.
Como podrás ver, el consumo de agua es vital para las personas, pero siempre en cantidades aceptables. Un abuso de esta pone en riesgo la salud.
Como sabrás, las recomendaciones de consumo de agua están en torno a los 2 litros al día. Y como te he comentado antes, no necesariamente debe ser su consumo en vaso; el agua de los alimentos también cuenta.
Tampoco debe saltar la alarma si al cabo del día se bebe más cantidad o menos. Se debe tener en cuenta, por ejemplo, el verano, donde las personas toman más cantidad de agua debido al calor; al igual que ocurre cuando una persona es deportista, que su consumo de líquidos también se verá aumentado. Por ello, no te preocupes si un día no llegas a los dos litros, pero tampoco te alarmes si un día llegas a consumir tres litros.
Tomar 2 ó 3 litros de agua no supone ningún problema para la salud.
Pero como te vengo comentado en este post, un consumo exagerado de agua sí que es peligroso. Un consumo por encima de cuatro litros diarios puede provocar alteraciones en el funcionamiento de los riñones y la composición de la sangre, derivando a un desequilibrio de electrolitos y fluidos en el organismo.
Una persona que padece potomanía suele beber entre cuatro y ocho litros de agua al día.
Poder identificar una persona con este trastorno en muchas ocasiones es complicado.
Es importante que la persona aborde el tema desde el punto de vista psicológico para que, poco a poco, vaya reduciendo el número de ingestas de agua. Además, este tratamiento debe combinarse también con la toma de medicación, si el facultativo correspondiente lo ve oportuno.
En cuanto al tratamiento nutricional, también es importante crear una estrategia para conseguir los objetivos de la persona. El tratamiento siempre será personalizado y estará guiado por un dietista-nutricionista especializado.
Como te comento en el punto anterior, la dieta para una persona que sufre este trastorno debe ser personalizada y enfocada a los objetivos que debe marcarse.
Uno de los principales objetivos, de manera general, que se deben pautar es la reducción de la ingesta de líquidos a través de la dieta. Esto quiere decir que la toma de sopas, cafés, zumos, etc, se verá restringida porque no se debe incitar a la persona a seguir consumiendo alimentos líquidos.
Dependiendo del grado de afectación, la persona beberá líquido por sí misma, no es necesario que incitemos a beber más cantidad con la comida.
Por ello, la dieta debe estar enfocada en alimentos densamente nutricionales, que aporten calorías y que la persona se quede saciada en cada toma para reducir las probabilidades de que siga ingiriendo agua.
Alimentos como el pescado azul, el aguacate, el aceite de oliva, los frutos secos o los quesos curados deben estar presentes. Además, la alimentación debe estar basada en alimentos reales y de calidad, evitando los productos ultraprocesados que estén cargados de azúcar, harinas refinadas y grasas de mala calidad.
El objetivo no es subir de peso, el objetivo es que la persona se quede lo suficientemente saciada como para reducir las probabilidades de necesitar ingerir agua.
A continuación, te dejo un menú ejemplo con comidas saciantes. Es importante anotar que se trata de un ejemplo general, en ningún momento está personalizado. Si sufres de potomanía, ponte en contacto conmigo y con los distintos profesionales cualificados que te ayudarán a conseguir tus metas.
Desayuno | Porridge de avena con bebida vegetal, canela, frutos secos y arándanos |
Media mañana | Tostada de plátano machacado con crema de cacahuete y un café |
Comida | Ensalada de lentejas con tomate picado, rábanos, pimiento, brócoli hervido, aguacate, pistachos, semillas de sésamo, queso de cabra y aceite de oliva. De postre una manzana |
Merienda | Macedonia de frutas con yogur griego natural, canela y avellanas |
Cena | Salmón al horno con guarnición de calabaza, pimiento y cebolla y boniato. De postre unas fresas con chocolate 80% |
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